Giulia Enders
Autor del bestseller alemán 'Darm mit Charme' (La hermosa máquina de alimentos), pág. 54
Un buen aceite de oliva puede costar unos dólares más, pero no sabe grasoso ni rancio, sino verde y afrutado. Si lo traga, tendrá una sensación de carne viva en la garganta debido a los taninos que contiene.
Así como las grasas malas pueden hacer cosas malas, las grasas buenas pueden ser beneficiosas. si gastas unos euros más en aceite de oliva prensado en frío (virgen extra) real, mojas tu baguette en un bálsamo beneficioso para el corazón y los vasos sanguíneos.